lunes, 19 de septiembre de 2011

Fred Astaire



FRED ASTAIRE - Frederick Austerlitz  (1899-1987) fue el mejor y más elegante bailarín cinematográfico de todos los tiempos, protagonista mítico de maravillosas películas que ejemplifican a la perfección el glamour y la sofisticación del cine de los años 30.

Nació el 10 de mayo de 1899 en la ciudad de Omaha, Nebraska, hijo de una familia austriaca que había emigrado de su país natal a los Estados Unidos.

Desde su más temprana edad, Fred Astaire demostró su gran talento para la danza, asombrando al público en las actuaciones escolares cuando apenas contaba cuatro años.

En su adolescencia, debutó profesionalmente en el mundo del cabaret y el music-hall tras perfeccionar sus dotes como bailarín y coreógrafo en la Alvien School of Dance, para posteriormente dar el gran salto a las tablas de Broadway. Su pareja en esta primera época sería su hermana Adele.

Con Adele, Fred Astaire acumularía éxito tras éxito, convirtiéndose en uno de los dúos de baile más famosos entre los aficionados a la comedia musical.

Uno de sus admiradores era el aristócrata británico Lord Charles Cavendish, con quien Adele se casaría en 1931, abandonando definitivamente el mundo de la danza.

Ante este contratiempo, Fred determinó probar fortuna en Hollywood. Antes de ello, hizo lo mismo que su hermana y se casó en 1932 con Phyllis Livingston Potter.

A pesar de que los resultados de su test cinematográfico: "No sabe actuar, no sabe cantar, esta un poco calvo, sabe bailar un poquitín", no presagiaban un halagüeño futuro en el séptimo arte consiguió debutar en un papel secundario en la película protagonizada por Joan Crawford y Clark Gable "Alma de bailarina" (1932) de Robert Z. Leonard.




El año siguiente haría pareja por primera vez con una rubia actriz llamada Ginger Rogers en el film "Volando hacia Río de Janeiro" (1933), que contaba con el protagonismo estelar de Dolores del Río. Astaire y Rogers aparecían como actores de reparto pero su número musical llamó la atención tanto al público que la RKO les propuso encabezar el reparto de su producción "La Alegre Divorciada" (1934) dirigida por su (posteriormente) habitual Mark Sandrich.

Fred y Ginger harían disfrutar a la audiencia mundial en la década de los 30 con nueve delicias vía RKO: además de las dos citadas, "Sombrero de copa" (1935) de Sandrich, "Roberta" (1935) de William Seiter, "Sigamos la flota" (1936) de Mark Sandrich, "Swing Time" (1936) de George Stevens, "Ritmo Loco" (1937) de Mark Sandrich, "Amanda" (1938) también de Sandrich y "La historia de Irena Castle" (1939), dirigida por H.C. Potter.

En este decenio, Fred Astaire sólo intervino en una película que no contuviera a Ginger como partenaire: "Señorita en desgracia" (1937) de George Stevens.

Justo al comienzo de los 40, el gran Fred decidió romper la pareja que tantos éxitos le había ofrecido y durante esos años protagonizó con diversas actrices otros magníficos trabajos.

Con Eleanor Powell intervino en "La nueva melodía de Broadway" (1940) de Norman Taurog, con Paulette Goddard en "Al fin solos" (1940) de H.C. Potter, con Rita Hayworth en "Desde aquel beso" (1941) de Sydney Lanfield y "You will never lovelier" (1942) de William Seiter, con Joan Leslie en "The sky's the limit" (1943) o con Lucille Bremer en "Yolanda y el ladrón" (1945) de Vincente Minnelli. Junto al popular cantante Bing Crosby también apareció en dos exitosos títulos: "Holiday Inn" (1942) de Mark Sandrich y "Cielo Azul" (1946) de Stuart Heisler.

A mitad de década, Fred se retiró brevemente para dedicarse a la enseñanza del baile pero retornó con el film de Charles Walters "Eastern Parade" (1948) con Judy Garland y con su pareja de antaño Ginger Rogers en "Vuelve a mí" (1949), también dirigidos por el especialista Walters.

Convertido en mito viviente, Fred Astaire nunca dejaría de trabajar en el cine hasta cerca de su muerte, siendo las mejores películas en sus últimas décadas "Royal Wedding" (1951) con Jane Powell, "Melodías de Broadway" (1953) con Cyd Charisse, "Papá piernas largas" (1955) con Leslie Caron, "Una cara con ángel" (1957) con Audrey Hepburn, "La bella de Moscú" (1957) con Cyd Charisse, "The Pleasure of his company" (1961) con Debbie Reynolds y "El valle del arco iris" (1968) con Petula Clark.

También se atrevió con papeles dramáticos en films como "La hora final" (1959) de Stanley Kramer o "El coloso en llamas" (1974) de John Guillermin e Irvin Allen, película por la cual sería nominado al Oscar como mejor actor secundario.

Su carrera cinematográfica tocó a su fin con el film de terror "Historia Macabra" (1981).

Tiempo atrás y por su extraordinaria contribución al mundo del espectáculo, Fred Astaire fue recompensado en 1949 con un merecido Oscar honorífico.

En 1954 había quedado viudo de su primera esposa, contrayendo matrimonio por segunda vez con la amazona Robyn Smith en 1980, a la que dejó viuda el 22 de junio de 1987 cuando murió en su hogar de Los Angeles. Tenía 88 años.
















1 comentario:

  1. Felicitaciones Jon, te he escrito una entrada en mi blog:

    http://1977voltios.blogspot.com/2011/10/las-caras-del-cine.html

    También te he dejado el mensaje en "Caras 1", suerte y a seguir con tan interesante proyecto

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